Chetumal.- Pese a la disminución gradual de contagios del COVID-19, tanto en el norte y sur de Quintana Roo, el cual ha favorecido a mantener el color amarillo en el semáforo epidemiológico de la Secretaría Salud (SESA)en Quintana Roo, lo cierto es que existen expresiones de relajamiento en la población, pero también una incongruencia en la línea discursiva del gobernador, amenazando con retroceder en los avances alcanzados hasta el momento.
Y es que, si bien el gobernador Carlos Joaquín en las últimas dos semanas ha anunciado una tendencia en la disminución de contagios por COVID-19, manteniendo su mensaje en el sentido de que deben de fortalecerse las medidas sanitarias, a efecto de que no se baje la guardia y se continúe el camino rumbo al color verde, para así mantener la recuperación de la economía en el Estado, calla sobre los actos masivos que han organizado partidos políticos.
No obstante, pese a los esfuerzos y a las campañas permanentes de difusión sobre lo vital que significa seguir a pie de letra las disposiciones sanitarias como lo es la aplicación de gel antibacterial, toma de temperatura, tapetes desinfectantes, uso obligatorio del cubrebocas y la sana distancia, poco a poco se pierde interés, pudiéndose constatar frecuentemente en sitios públicos y así como también observó en los registros de candidatos en casi todos los municipios de Quintana Roo.
Esta mañana el gobernador dio a conocer que durante el fin de semana estuvo recibiendo fotos y reportes de aglomeraciones en playas del Estado. En ese sentido recordó que aún Quintana Roo se encuentra en pandemia y que de todos depende salve vidas y la economía de la Entidad, por lo que advirtió es importante “no bajar la guardia”.
Por otro lado, mientras se restringe el acceso a playas y espacios de convivencia familiar, hace más de mes y medio, a lo largo y ancho de Quintana Roo, figuras políticas han organizado reuniones con notables concentraciones de gente, sin el respeto a la sana distancia mucho menos el uso adecuado del cubrebocas.
Esto, además, se comprobó durante los registros de aspirantes, donde a pesar de las “restricciones”, desfilaron en caminatas gran cantidad de personas, sin los cuidados necesarios ni tener el cuenta el latente riesgo de contagio por la enfermedad pandémica.
Mientras los discursos habla de prevención, en la realidad se descuidan actividades como por ejemplo, las políticas y proselitistas, contrario a lo que se pide, exige y obliga a la población, permitiendo y solapando actos de los partidos políticos, que arriesgan la recuperación económica que, “supuestamente” tanto preocupa a Carlos Joaquín González.
O todos coludos, o todos rabones, ¿No, señor gobernador?