* Con propuestas del pueblo para el pueblo
CANCÚN, Q. ROO.- Con la presentación de los candidatos a diputados federales del Partido del Trabajo (PT) en una conferencia de prensa en céntrico restaurante de la ciudad de Cancún este domingo, a cargo del comisionado estatal de dicho instituto, Hernán Villatoro Barrios, comenzaron oficialmente las actividades proselitistas de sus postulados en los tres distritos electorales que comprenden el Estado de Quintana Roo.
De tal manera que Miroslava Reguera Martínez contenderá por el Distrito 01, en tanto que Mauricio Morales Beiza hará lo propio en el 02 y Lorena Martínez Bellos medirá fuerzas en el Distrito 03, y quienes coincidieron que su principal propuesta es la abrogación de las contra-reformas impuestas por el Presidente Enrique Peña Nieto, de extracción priista y avaladas por los partidos que firmaron el “Pacto por México”, PRI, PAN y PRD.
En su intervención, ante los representantes de los medios de comunicación, dirigentes municipales y estatales, así como militantes del PT, el postulado a legislador federal en el Distrito 02, Mauricio Morales Beiza, destacó que las propuestas de este instituto político son emanadas de las propias demandas del pueblo, el que se queja de la falta de dinero por una desafortunada Reforma Fiscal, de una mala educación por una Reforma Educativa que es más administrativa y laboral que afecta a los maestros.
Es por ello que en su campaña de suelo, sudor y saliva, que realizarán con mucho entusiasmo, su máxima propuesta será la abrogación de las reformas estructurales de Enrique Peña Nieto ya que solo favorecen a 12 millones de mexicanos contra 100 millones de ciudadanos que día a día se truenan los dedos para llevar el sustento a sus hogares, por lo que invitó a la ciudadanía a salir a votar y ser partícipes de este proceso electoral que puede cambiar la historia con el sufragio que emitan.
Asimismo Morales Beiza señaló que al ser el Distrito 02 en un 90 por ciento agropecuario, pugnará por proponer iniciativas que conduzcan a un verdadero apoyo al campo para su desarrollo, tanto en el estado como en todo México y de esta manera alcanzar una soberanía alimentaria, como la que la tenía el país en la década de los 50, toda vez que ahora se importa lo que se consume.