Chetumal.- Como “balde de agua fría” le cayó al PRI en todo el país el dictamen que emitió la Suprema Corte de Justicia de la Nación al declarar inconstitucional la consulta pública que pretendía realizar para reducir el número de senaduría y diputaciones federales plurinominales durante las elecciones del 2015.
Como suele suceder en estos casos el PRI en Quintana Roo, guardó silencio ante tal rechazo que fue presentado en el proyecto del magistrado José Fernando Franco y apoyado por el Pleno; la pregunta: “¿Estás de acuerdo en que se modifique la Constitución para que se eliminen 100 de las 200 diputaciones federales plurinominales y las 32 senadurías plurinominales?”; fue la causa del rechazo del Pleno de la SCJN y con esto prácticamente concluyeron todos los temas de las consultas públicas. Todas ellas rechazadas.
No hubo comunicado oficial, tampoco postura del líder estatal, Pedro Flota Alcocer quien apagó su celular y solamente la secretaria general, Leslie Baeza Soto un tanto despistada y tratando de eludir el tema, dijo que todavía no cuentan con la resolución oficial y que será hasta que llegue cuando sabrán que hacer.
Con esto no solamente los magistrados de la SCJN dan la razón a los partidos de oposición que señalaron en reiteradas ocasiones que era una medida populista y que afectaría a las minorías; sino que dieron muestra que aun y con toda la orquesta armada al PRI no le fueron suficientes la millonaria cantidad de firmas que recabaron a nivel nacional para lograr la consulta pública; en algunos casos trascendió que llegaron a pagar por obtener la copia de la credencial y la firma de alguna líderes de colonia.
Finalmente de tres propuesta hechas por los principales partidos políticos para consulta pública, ninguna fue validada por la SCJN y aunque ha generado malestar entre la población sobre todo por el tema de la reforma energética, al final la máxima sala tuvo la última palabra.