La política y sus demonios
La frase simplona de que “Morena gana con cualquiera” se topará con que la coalición Va por Quintana Roo, encabezada abiertamente por el gobernador Carlos Joaquín, invertirá los recursos que sea necesario para intentar recuperar la capital
Por Felipe Hernández
Hasta las últimas horas de este jueves 4 de febrero, sólo cuatro de los muchos aspirantes que en las últimas semanas han manifestado su interés, se habían inscrito en el proceso interno de Morena para buscar ser candidatos a la presidencia municipal de Othón P. Blanco: Florentino Balam Xiu, Hassan Villanueva Martínez, Luis Gamero Barranco y Mario Rivero Leal, los tres últimos vinculados con la senadora Marybel Villegas Canché. El plazo vencerá el 7 de febrero, es decir, aún queda suficiente tiempo para que los demás hagan el trámite respectivo.
Morena diseñó una convocatoria para procurar que ninguno de los aspirantes que no resulten beneficiados con las candidaturas en Quintana Roo puedan brincar fácilmente hacia cualquier otro partido y competirle en contra, por eso los plazos tan complicados del proceso: límite (por ahora) el 2 de marzo para determinar quiénes de todos los inscritos serán seleccionados para pasar a la siguiente fase: una encuesta cuyos detalles serán privados, que no se difundirá públicamente y a la que deberán someterse todas las precandidatas y precandidatos; de tal modo que quien resulte “ganador” de tal encuesta apenas tenga el tiempo suficiente para ser inscrito ante las autoridades electorales en el plazo legal. Amarrados y callados, pues.
Othón P. Blanco, municipio capital, sede de los tres Poderes del estado, atraviesa en este proceso interno de Morena y sus aliados una situación singular: es apenas una pieza del tablero político en el que los factores de poder que ya se disputan la candidatura a la gubernatura para las elecciones del año próximo quieren mover a su antojo, para tener las arcas del Ayuntamiento a su disposición y para que las autoridades municipales más que ocuparse en resolver las necesidades de los othonenses se conviertan en operadoras políticas. Por eso resulta muy evidente para un amplio sector de la ciudadanía que la mayoría de las y los aspirantes tienen madrina o padrino que intentarán imponerlos a como dé lugar en la candidatura y luego en la presidencia municipal. Pobre Othón P. Blanco.
La ciudadanía debe estar muy atenta a los perfiles que decidan inscribirse en la contienda interna morenista, para que el Ayuntamiento no vuelva a quedar a cargo de un presidente municipal ajeno a los intereses de los habitantes del municipio y que sólo responda al objetivo de su madrina o padrino, quien lo tendrá como simple operador para afianzar su propia aspiración a la gubernatura, y muy probablemente como caja chica para financiar tal aspiración, cuando es más que evidente que ya urge un Ayuntamiento eficiente, responsable y competente.
De los cuatro aspirantes inscritos hasta el momento de redactar estas líneas sólo Florentino Balam Xiu, profesor con amplia trayectoria en la lucha sindical y en el activismo social, exsecretario general de la Sección XXV del SNTE en Quintana Roo y exdiputado local, parece mantenerse ajeno a padrinazgos y madrinazgos, y aparentemente es el único que puede ser capaz de conciliar las posiciones encontradas de los factores de poder estatal del morenismo, para que esas diferencias no trastoquen la campaña de Morena y sus aliados en Othón P. Blanco, en el entendido de que la coalición Va por Quintana Roo (PAN, PRD, PRI, Confianza por QR), encabezada abiertamente por el gobernador Carlos Joaquín, invertirá los recursos que sea necesario para financiar la estructura que buscará la victoria en la elección del 6 de junio. La frase simplona de que “Morena gana con cualquiera” no describe la realidad de la competencia electoral en Othón P. Blanco.