Valladolid.- Después de días de calor intenso y amenazas de lluvia, por fin Chaac tuvo piedad de los vallisoletanos y dejó sentir por poco más de una hora sus efectos.
Asediada por muchos, para apaciguar los bochornosos efectos de una oleada de calor, la lluvia permitió refrescar el ambiente nocturno de ayer y el matutino de este jueves.
Encharcamientos, fresco, conciliación de sueño y antojos de café con pan y bizcochitos fue el saldo del torrencial aguacero, que durante el tiempo que cayó paralizó el movimiento cotidiano vespertino de la ciudad.
Según pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional, está previsto que este jueves continúen las lluvias en Yucatán, acompañadas de actividad eléctrica y vientos superiores a los 50 kilómetros por hora, provocadas por la Onda Tropical No. 14 que está próxima a llegar a la Península.