A pesar de la alerta que ha emitido el gobierno del estado por el incremento de casos positivos de Covid-19 en la cabecera municipal y de permanecer en confinamiento, los vendedores ambulantes no paran y estos continúan saliendo a las calles para ofrecer sus productos en la vía pública.
Tal es el caso del señor Crisanto Suarez Pech, quien dijo que carece del privilegio de quedarse en casa, pues todos los días tiene que salir a buscar la manera de ganarse unos pocos pesos para llevar el sustento a su casa.
Refirió que a través de los medios informativos se enteró del incremento de casos positivos de Covid-19 en la ciudad, así como de la alerta que emitió el gobierno del estado días atrás para reforzar las medidas de prevención.
Reconoció que las disposiciones sanitarias implementadas por las autoridades de salud son las correctas; sin embargo, paras las personas que trabajan en el comercio ambulante no aplica, ya que si no salen a laborar un día no hay para comer.
Externó que el consciente del riesgo que implica tener que salir a ofrecer sus productos en la vía pública, ya que tiene contacto directo con las personas y algunas de ellas podría ser portador del virus sin saberlo.
Comentó que para mitigar los riesgos de contagio en la calle ha optado por acatar las medidas sanitarias como usar el cubrebocas, de igual forma, lleva consigo gel antibacterial y agua con cloro para desinfectarse las manos.
De igual forma, refirió que ha reducido su horario de trabajo, pues ahora sale de 8 de la mañana a 2 de la tarde, cuando anteriormente regresaba a su hogar después de las 8 de la noche.
Dos Crisanto Suárez Pech es uno de los muchos vendedores ambulantes que salen todos los días a ganarse la vida, a pesar del incremento de casos positivos de Covid-19 en la cabecera municipal.