Por Javier Chan
Felipe Carrillo Puerto.- Aunque se había dicho que en el nuevo camposanto, no se estaban apartando espacios, se está haciendo todo lo contrario al amparo de algunas autoridades municipales, por lo que habitantes que acuden al cementerio hacen un llamado a las autoridades para tomar cartas en el asunto.
Contrario a lo estipulado previo a su apertura en el mes de agosto pasado, el nuevo camposanto pareciera haber caído en las mismas irregularidades que el viejo, toda vez que ya se están aparatando espacios para algunos interesados en la compra e incluso se ha permitido la edificación sobre las tumbas con el consentimiento de las instancias responsables de la administración del lugar.
En un recorrido en el nuevo panteón municipal ubicado en la calle 39 entre 44 y 48 de la colonia Javier Rojo Gómez, se pudo observar que el espacio ya cuenta con cerca de un centenar de personas enterradas en el lugar, además se aprecian algunos similares a los del viejo cementerio que con el tiempo provocaron un gran desorden.
Es preciso mencionar que la apertura del camposanto corrió a cargo de la administración municipal anterior y de acuerdo al entonces Secretario General, Juan Carlos Zapata Cabrera se habían previsto medidas necesarias para evitar una rápida saturación y desorden tal como el caso del viejo panteón ubicado en la colonia Juan Bautista Vega.
Para tal efecto, se designó la administración conjunta a la Oficialía del Registro Civil como encargada expedir los certificados de defunción y documentación correspondiente al proceso de entierro, mientras que sería la Dirección de Servicios Públicos Municipales, la responsable de designar los lotes, además que ambos daría a conocer a los familiares de los difuntos las limitaciones que se habían previsto sin excepción alguna.
Entre las medidas estipuladas se encuentra la no venta anticipada de lotes para garantizar que no surja nuevamente el desorden en el lugar, por lo que cada espacio se estará designando como se vaya requiriendo. Además se prohibiría la edificación a los costados de las tumbas, esto con la finalidad de no utilizar más espacio de lo necesario ni invadir lotes aledaños.
No obstante, estas normas han sido olvidadas en los últimos meses, toda vez que en el recorrido en el panteón municipal se puede observar que se han vendido lotes de manera anticipada y además se ha permitido la construcción perimetral en las tumbas, lo que ocupa espacio de más y de igual forma entorpece el camino hacia otras tumbas.
Ante tal situación pareciera que los actuales titulares de la Oficialía de Registro Civil y de la Dirección de Servicios Públicos han hecho caso omiso a la normatividad prevista para el nuevo camposanto y que de continuar de la misma manera estará provocando el pronto desorden tal como el caso del antiguo cementerio.