Exigen mayor vigilancia de los cuerpos de seguridad.
Chetumal.- El asalto a mano armada que terminó el homicidio de un empleado de la SCT cerca de la localidad de Pedro A. Santos y el intento de robo a un Oxxo ubicad en Huay Pix ha generado una ola de miedo entre los habitantes de las diversas comunidades tanto de Othón P. Blanco como Bacalar y del personal que laboran en diversas empresas comerciales.
Por lo anterior piden que las autoridades policiales de los tres órdenes de gobierno, refuercen la seguridad en la carretera Chetumal-Cancún porque no descartan que sigan incrementando los delitos ante la falta de vigilancia de las policías; sobre todo ahora que llega fin de año y que el flujo de capital será mayor.
Aunque los dos hechos resultan aislados entre sí para las autoridades de la Procuraduría de Justicia del Estado y las policías de los tres órdenes de gobierno, el temor que ha causado se ha expandido también en la ribera del Río Hondo donde la vigilancia de la zona es competencia estatal y municipal; en este caso del ayuntamiento de Othón P. Blanco.
José, quien pidió omitir su apellido por obvias razones, dijo que él labora desde hace varios años en una empresa dedicada a vender diversos productos y su ruta es rural, es decir recorre las localidades de Bacalar y Othón P. Blanco para surtir las distintas tiendas que existe en lugares cercanos a la carretera y comunidades rurales; él ha sido víctima de dos asaltos y aunque teme por su vida la necesidad lo hace seguir en ese empleo aunque luego de lo sucedido esta semana piensa seriamente seguir.
Gracias a nuestro entrevistado, logramos también conocer casos de otras personas que trabajan para empresas refresqueras y a la venta de botadas e incluso de dependencias federales como Liconsa y Diconsa; quienes señalan que también han sido víctimas de asaltos o al menos intentos en varias zonas de las carreteras del estado, pero que aún y con las denuncias las autoridades hacen caso omiso para aumentar la vigilancia.
Aunque en el caso de la SCT presumen que es un asunto interno, los entrevistados señalaron que se necesita además de armas, conocimiento en la forma de asaltar y eso solamente los tienen personas dedicadas a estos delitos y que ya operan en las carreteras de la Zona Sur del Estado y las autoridades no las quieren ver; pero el miedo ya existe entre los habitantes de las comunidades y los empleados de diversas empresas, incluso de pasajeros.
Por tal motivo piden que sea reforzada la vigilancia en las vías de comunicación de la entidad por parte de las autoridades y aunque corresponde de manera directa a la Policía Federal (PFP), también el estado y los ayuntamientos tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad de los transeúntes en la geografía de sus demarcaciones y evitar casos como los sucedido en Bacalar y Othón P. Blanco.