JMM.- Tal parece que el cuidado al medio ambiente en la administración del presidente Erik Borges da mucho que desear. A inicio de año nombró a José Luis Gómez Martín como nuevo encargado de la dirección de Servicios públicos local para ofrecer a la ciudad una mejor función, sin embargo, el aprendiz de servidor público se le olvidó la naturaleza, pues atentó contra ella al mandar a «podar» un par de arboles que brindaban sombra en el Parador Turístico.
En plena luz del día se observó como los árboles del lugar que tenían como función brindar sombra a la gente, además de ser un atractivo a ese espacio que permanece cómo «Elefante Blanco» en la administración de El Rebelde, habían sido devastados, mostrando una imagen «lamentable«.
El ecocidio al parecer fue ordenado por el aprendiz de servidor público, José Luis Gómez Martín, actual encargado de dicho departamento, quien se le olvidó la importancia de la naturaleza, sobre todo, en un espacio destinado para impulsar el turismo local.
Fue tan descarado el acto que incluso dejaron las ramas de esos árboles que habían «podado», causando verdadero asombro a la gente que pasaba en el Parador Turístico, puesto que no podrían creer tal atentando por parte de la autoridad municipal.
De acuerdo con los ciudadanos señalaron que no ha sido la primera vez que la dirección de Servicios públicos en la administración de Erick Borges comete tales actos. En el mando de esa oficina, la actual sub-directora de Servicios públicos, Yara Cecilia Pacheco, también cometió ecocidio al ordenar el «mantenimiento» en un sector de árboles del parque principal de la ciudad los cuales devastó.
Los ciudadanos cuestionaron a los servidores públicos que son designados a ocupar un puesto en la administración local, ya que, al parecer, solo ordenan «trabajos» que dan mucho que desear, además que no son supervisados por El Rebelde.
El acto criminal contra la naturaleza refleja la ignorancia las autoridades municipales que están a cargo del municipio, pues no entienden la importancia de preservar árboles en el entorno, mientras tanto, El Rebelde presume de los árboles que son sembrados en el parque Forjadores del Kilometro 50, dónde se lleva a cabo la modernización de la misma.