Encubierto bajo un falso traje de protector de campesinos y hombres de campo, el nefasto y denigrante Germán Aurelio Parra López ha pasado casi una década como funcionario de primer nivel de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural e Indígena (Sedari) y a la fecha los quintanarroenses se preguntan los motivos por los cuales Roberto Borge Angulo lo mantiene dentro su gabinete.
La mayor virtud que se le conoce al ex presidente municipal de José María Morelos que gobernó durante el periodo 2002-2005, es ser un “arrastrado” y “sumiso” del Gobernador en turno, como sucedió durante la gestión de Félix González Canto y ahora en los primeros años de Borge Angulo.
Por su misma condición de ser incondicional y un “lame botas”, Germán Parra logró fungir como titular de la Sedari de manera interina, pero durante ese lapso dejó constancia de su nula capacidad política al no poder resolver el problema que tuvieron los labriegos con la aseguradora, lo que al final obligó a la administración estatal desembolsar una fuerte suma millonaria para apoyar a los campesinos que había perdido sus cosechas de maíz.
La incapacidad de Germán Parra López se puso de manifiesto desde que se desempeñó como diputado local, cuando siendo presidente de la Comisión de Agricultura en la IX Legislatura no logró destinar recursos económicos para mecanizar o tecnificar el campo quintanarroense, ni el de José María Morelos, el mismo que él auto clasificaba como el “granero de Quintana Roo”.
Tal parece que Germán Parra piensa que es suya y eterna la Subsecretaría que tiene en la Sedari, a tal grado de aprovecharse de la incapacidad del actual secretario de la dependencia, Luis González Flores, que desconoce las cuestiones del agro quintanarroense, para definir las políticas de la secretaría, obviamente, apoyando a sus incondicionales.
Pero en fin, no hay peor ciego que no quiera ver y darse cuenta que Germán Parra es un “estiércol” que no ha dejado avanzar al campo quintanarroense; lo sano sería que siniestro “hijo de Xcabal” retorne a su “chan-pueblo” y apoye al desubicado de su hermano que funge como alcalde de José María Morelos.
Total si desde el inicio desde septiembre pasado Germán Parra es el “brazo derecho” de su hermanito; Germán Aurelio se encarga de cobrar el diezmo a las empresas que reciben obras en el municipio, es con Germán con quien deben hablar los interesados en prestar un servicio a la comuna morelense.
No cabe duda que el alumno (Germán Parra López) superó a su padrino y papá político (Roger Cristino Flota Medina).