Por: Jesús Amador
Chetumal.- Sin duda que la elección del próximo año será la «máxima prueba» que tendrá Morena en su corta historia como partido político, por primera vez no estará en las boletas electorales el hombre que logró cambiar la historia política en el Mexico moderno y también, porque deberá desafiar y superar varias encrucijadas internas, como las cuotas de poder de sus grupos políticos y el tema de la reelección de sus militantes que ahora fungen como diputados federales y presidentes municipales, respectivamente.
Aún cuando la nación se encuentra inmersa en el tema de la contingencia sanitaria provocada por el Covid-19, la plana mayor guinda trabaja a marcha forzada para, primeramente, elegir a su nueva dirigencia o en su caso ratificar el interinato de Alfonso Ramírez Cuellas, además de darle forma al «borrador» que trae sobre los escenarios que tiene en los 300 distritos electorales del país, gobernaturas y presidencias municipales que estarán en juego el primer domingo de junio del 2021.
Para Morena es más que urgente definir su situación directiva, es importante que en breve conozcan quién tendrá el poweer para concertar y repartir las candidaturas con los diversos grupos politicos que ya se han formado al interior.
Por ejemplo es un secreto a voces que en Quintana Roo Morena tiene varios grupos políticos bien indentificados. Los más notorios son el del senador, José Luis Pech Varguez; El de Marybel Villegas Canche; El del diputado federal Luis Alegre Salazar y el de la presidenta municipal de Cancún, Mara Lezama.
También hay otros, obviamente con menor impacto que los antes mencionados, como el del diputado federal Jesús Pool Moo, la alcaldesa de Solidaridad, Laura Beristain y el de la regidora cozumeleña con licencia, Juanita Alonso.
En los últimos meses los grupos del «doctor» Pech, Marybel Villegas, Luis Alegre y Mara Lezama han trabajado para sumar simpatizantes y crear sus respectivas estructuras en los once municipios quintanarroenses, a tal grado que hoy en día, esos cuatro grupos cuentan con los «candidatos (as) idóneos» para representar a Morena en los próximos comicios, llámese presidencias municipales y en las cuatro diputaciones federales.
En esta entrega analizaremos pormenores de las presidencias municipales, de manera particular algunas de ellas, por ejemplo:
Benito Juárez.- Si no sucede ningún ex abrupto entre los grupos políticos intentos de Morena y se respetan los compromisos verbales realizados entre la cúpula de Morena (AMLO) y el Partido Verde (senador, Manuel Velazco), es casi seguro que la candidatura la presidencia municipal que hoy gobierna Mara Lezama sería para el diputado Verde, Gustavo Miranda García.
Sin embargo la moneda se encuentra en el aire y a la fecha no se descarta la posible reelección de Mara Lezama, máxime si se toma en cuenta que en las últimas encuestas, ella junto a los diputados federales Luis Alegre y Jesús Pool, así como la diputada local, Reyna Durán, reciben buenas calificaciones, un buen porcentaje de cancunenses los conocen y avalan su desempeño como servidores públicos.
Solidaridad.- La alcaldesa Laura Beristain está hasta vendiendo su «alma al diablo» para lograr que la dirigencia nacional avale su reelección, pero se antoja muy difícil, en casi dos años su gobierno ha dejado constancia de no estar a la altura de las circunstancias, principalmente porque ha abandonado las causas sociales, ha dejado crecer la inseguridad y para acabar, avalado la creación de nuevos impuestos para los solidaridenses.
En las últimas encuestas el morenista amigo del «doctor» Pech, Omar Sánchez Cutis, sale bien posicionado como posible candidato a la presidencia municipal, solo por debajo del andremanuelista, Arturo Castro, quien sin levantar polvo sigue realizando trabajo proselitismo de campo.
Othón P. Blanco.- Aquí los «marybelistas» y amigos del «doctor» Pech se están dando hasta con la cubeta para ver quién se queda con la candidatura en el 2021, ya que de manera automática el alcalde interino Othoniel Segovia Martínez está descartado, porque en menos de un año ha entendido que su fuerte no es la política.
El nefasto Othoniel Segovia está consciente que su oportunidad para reelegirse es mínima y por ende apoya la anticipada campaña proselitista de su secretario particular, Luis Gamero, quien mantienen una fuerte disputa con el secretario de la comuna, Alejandro Rivera y la síndico, Yensuni Martínez, mismos que comulgan con la ideología del senador Pech Varguez.
El problema para todos ellos es que en las encuentas de Morena, sobresalen los nombres del empresario Gustavo Pech Galera (hijo del senador Pech), del diputado petista, Roberto Erales Jiménez y el nombre de una dama que trabaja para el gobierno de Carlos Joaquín.
En otros municipios Morena también está midiendo popularidad, por ejemplo en Isla Mujeres sobresale el actual diputado, Edgar Gasca Arceo; en Cozumel la diputada federal «Joaquinista», Adrián Teisser; en Tulum la «marybelista», Euterpe Valasis; en José María Morelos, Erik Borges Yam, Rivelino Valdivia y Ana Pamplona en Bacalar y en Felipe Carrillo Puerto, Luis Miss.
Seguramente en los próximos días o meses observaremos la presión que ejerzan los citados grupos políticos, lo que sin duda provocaria que Morena no postule al mejor candidato y por ende el triunfo no estaría seguro.
¿Podrá la dirigencia nacional de Morena conciliar los intereses de sus grupos en Quintana Roo, o mejor dicho, estos últimos acatarán la orden que envíen el CEN de Morena o el propio AMLO?
Tiempo al tiempo…