Por Javier Chan
Felipe Carrillo Puerto.- Desde su sorpresivo nombramiento como directora de la Casa de la Cultura de esta ciudad, han sido múltiples los señalamientos de padres de familia contra Karina Sala Ríos, pues ha sido evidente su prepotencia contra el personal que labora en el lugar e incluso ahora ha anunciado el cobro para niños y jóvenes que deseen participar en los cursos y talleres de verano.
De acuerdo a padres de familia con hijos que participan en los diferentes cursos que se brindan en la Casa de la Cultura, han sido varias ocasiones en las que han atestiguado la forma en la que la directora se dirige hacia los maestros de talleres y cuyos trabajos realizados en conjunto con los niños ha catalogado como basura que debe ser retirada para reordenar las salas para brindar mejor imagen.
En este sentido los inconformes señalaron que es lamentable la actitud prepotente de Karina Sala quien ha sido identificada como la hermana de Pedro Sala Ríos, quien en meses atrás fue nombrado como responsable de la Recaudadora de Rentas en el municipio de Felipe Carrillo Puerto.
Aunado a ello, los inconformes señalan que pese a que en el interior de la institución está prohibido el consumo de alimentos y bebidas, la directora ha instalado una mesa para la venta de comida chatarra en los pasillos internos de la Casa de la Cultura y que es atendido por jóvenes estudiantes que aparentemente realizan su servicio social.
De igual forma, se ha anunciado a los padres de familia que los cursos de verano que siempre habían sido impartidos de manera gratuita, ahora tendrán una cuota de inscripción que van desde los 30 a los 100 pesos por alumno, acto que ha sido catalogado por los paterfamilias como un negocio en el interior de la institución.
Esto debido a que uno de los nuevos talleristas ha sido identificado como sobrino de la directora y el curso que impartirá representa el más costoso para los niños y jóvenes interesados.
Cabe mencionar que en el evento artístico y cultural para clausurar de los cursos del primer semestre del año, fue una sobrina de la directora quien fungió como presentadora y maestra de ceremonia, lo que ha provocado cuestionamientos contra la directora cuyos familiares se han estado incorporando “por palanca” y de forma evidente.