Chetumal.-la titular de jefa de la ZOFEMAT en el Ayuntamiento de OTHÓN P. Blanco, es pareja sentimental del empresario Josué Osmany Palomo Hoil, quien hace unos días aspiraba a dirigir a la CMIC, pero fue más su ambición que fue seducido con ofrecimientos de millonarios contratos y beneficios económicos al interior del organismo de constructores.
Chetumal.- Las culpas se siguen repartiendo luego del cementerio de vegetación en el que se convirtió el Bulevar Bahía de Chetumal, por la tala de más de 75 árboles realizado el pasador 9 de enero, calificado como un evidente ecocidio, por las obras de remodelación del emblemático malecón en la capital.
Pero mientras las culpas se reparten, los verdaderos responsables son protegidos con impunidad, y las autoridades encargadas de la justicia enmudecen con profundo cinismo a pesar de la cruel devastación de flora que vergonzosamente escaló en un dos por tres a planos nacionales.
Al revisar las actuaciones de las autoridades involucradas en el asunto, salió a relucir la incapacidad e ineptitud de la Jefa de la Zona Federal, Marítima y Terrestre (ZOFEMAT) en el municipio de Othón P. Blanco, Ileana del Rocío Tun Campos, quien actualmente es Diputada Federal Suplente por el Distrito 02, cuya titular es Alma Anahí González Hernández en la LXV en el Congreso de “San Lázaro”.
El 6 de octubre del 2021, Ileana del Rocío Tun Campos, fue nombrada por la alcalde municipal de Othón P. Blanco, Yensunni Martínez, como la Jefa de la ZOFEMAT, donde sus principales funciones son las de velar, cuidar, proteger, e incluso sancionar a quienes cometan alguna irregularidad sobre las áreas federales en el municipio, el Bulevar Bahía de Chetumal es uno de ellos, siendo un área del ámbito de competencia de la ZOFEMAT, escenario del ecocidio.
Entre otras facultades, también tiene las de otorgar concesiones, permisos y autorizaciones para uso de ZOFEMAT, pero increíblemente no ha existido postura alguna con tal de defender a su “jefa”, la alcaldesa municipal Yensunni Martínez, convirtiéndose en cómplice por omisión y evasión de sus responsabilidades las cuales son castigadas por la Ley de Servidores Públicos del Estado de Quintana Roo.
Tal parece que en Othón P. Blanco no hay quien salvaguarde el entorno de las zonas federales, puesto que todo indica que la instancia constituida para tal efecto, solo sirve de “comodín” para bisnes y negocios a ultranza para desviar recursos públicos por multas y enriquecer sus bolsillos.
Mientras se privilegian los “amarres” al mejor postor al interior del Ayuntamiento Capitalino, hacer “negocios” sigue estando de moda en el servicio público, por lo que la pareja de Ileana Tun Campos, hace unos días quiso aferrarse a dirigir a la CMIC, pero fue “bajado de un porrazo” al dejarse seducir por promesas de contratos y beneficios económicos al ser colocado por segunda ocasión como el “financiero” de la agrupación de constructores en el Estado de Quintana Roo.
Y claro que es atractivo ser tesorero, más aún cuando te prometen dejarte disponer a diestra y siniestra de los recursos de los empresarios de la construcción para satisfacer intereses políticos y de grupos minonitarios, a conveniencia de unos cuántos.
Así los ambiciones de la dupla sentimental Tun-Palomo, quienes apenas asoman la nariz en la palestra política y ya quieren engolozinarse de las mieles del poder para satisfacer sus intereses personales, aferrados a la espalda del reinado de MORENA.