Por Mario Castillo
Chetumal.-El negocio informal, ha sido desde origen el gran enemigo de las empresas establecidas, dado que se prolifera por doquier saliendo del control de las autoridades, y ganando terreno a quienes llevan a cuestas enormes cargas tributarias y administrativas.
Eloy Quintal Jiménez, dirigente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos de la zona sur de Quintana Roo, señaló que las cifras marcan un preocupante incremento de este tipo de negocios.
En este sentido, detalló que del gran universo de negocios que nacen fuera de la formalidad, más del 95 por ciento se concentran en el giro de alimentos, causando grave afectación a la industria de alimentos y bebidas formalmente establecida.
«Cuando hablamos de formalidad hablamos de empresas que pagan impuestos, hablamos de trámites; de obligaciones más altas que la informalidad propiamente no cubre, y es por eso que exigimos que el trabajo de los tres órdenes de gobierno se haga notar en el combate a este problema», refirió.
De acuerdo a parámetros nacionales -explicó el líder de la Canaco-, la informalidad ha crecido en un 54 por ciento respecto de la empresa establecida, y Quintana Roo no es ajeno a este fenómeno.
En el caso particular de Chetumal, abundó Quintal Jiménez, se han contabilizado alrededor de 800 negocios que operan fuera del marco legal, esto en cuanto alimentos se refiere.
Inpecciones, multas e imponer obligaciones para sujetarlos a las reglas, sugirió Eloy Quintal deberían poner en marcha las autoridades para abatir la informalidad que les impacta como cámara empresarial.