Por: Rosy Covarrubias.
Para nadie es secreto que la llegada de las redes sociales, han dado un giro al periodismo tradicional, hoy cualquier ciudadano, puede hacer uso de su derecho a la libre expresión, y comentar algún suceso, cuestionar comportamientos de políticos y funcionarios o simplemente informar de hechos que interesen la sociedad.
No significa que el periodismo vaya a desaparecer, por el contrario, hoy más que nunca urge la actualización y profesionalización de los comunicadores. Los géneros periodísticos, tienen formas, reglas y procesos bien definidos, no es lo mismo que un ciudadano haga uso del derecho constitucional a expresarse, a hacer periodismo, sin embargo la falta de interés o de opciones de capacitación continua hace que esta noble profesión esté entrando en un letargo, con el gran riesgo a ser desplazada.
Por esto y más es relevante el que en los próximos días Quintana Roo sea sede de la II Cumbre iberoamericana de periodismo, a efectuarse en la Ciudad de Cancún del 13 al 15 de mayo, y donde se espera la presencia de panelistas y conferencistas internacionales.
Destacan en este evento, la asistencia de Luis Alberto Balcarce, experto en periodismo digital, Gerard López Gallo, Periodista investigador de Discovery Channel, Abraham Geifman, de CNN, Sara Osuna, responsable del proyecto europeo ECO, Ramón Mondragón de la UNESCO, Aurelio Collado Torre, catedrático del TEC de Monterrey, Alberto Ciurana, experto en medios y contenidos y destaca la participación de Rómulo Caballeros, es-ministro de economía de Guatemala y hoy Asesor de la Unión Europea para México, Centro y Sudamérica.
El tema central de este evento será, “MEDIOS, PERIODISMO Y DESARROLLO: El poder de Internet, en América Latina” y está auspiciado por profesionales del periodismo , de la Universidad Autónoma de México, Por la Representación en México de la Comunidad Económica Europea, la Secretaría de turismo de Quintana Roo, entre otras Instancias, que han unido sus esfuerzos para reunir en Cancún a los más representativos del periodismo tanto de México, y Europa.
No podemos concebir una sociedad en desarrollo y dejar al margen al periodismo, que constituye el vínculo entre sociedad y gobierno y que hoy se encuentra en gran parte del mundo secuestrado por intereses ajenos a la sociedad, hoy Karen Santamaría, Dirigente de la Fundación “Corazón de Niña” y quien encabeza la organización de este evento, señala con gran acierto, que los periodistas y medios de comunicación ocupan un lugar sustancial en la agenda de trabajo mundial, con un impacto directo en el desarrollo humano, la gobernabilidad y la democracia, sin estar al margen en temas de Derechos Humanos, Desarrollo Comercial, o el cambio climático y la educación.
El margen de acción del periodismo va mucho más allá de la nota roja o de la política, es importante que quienes hemos decidido optar por esta vía como forma de vida, estemos conscientes de nuestro gran compromiso social. Y aquí quiero agregar algo que con mucho prontitud y certeza señala Karen Santamaría, en el sentido de que somos responsables de que la población observe y comprenda la complejidad de este siglo en que vivimos, saturados de información y no resulta una tarea fácil, cuando se antepone el negocio a la veracidad y como consecuencia nuestra profesión se ve inmersa en una severa crisis de credibilidad.
Hoy no es concebible ejercer el periodismo con métodos del siglo pasado, tenemos la Obligación moral de actualizarnos, de ofertar mayor calidad a los medios y por ende a la sociedad, mientras que los empresarios periodísticos, también ganan, al tener mejores periodistas, pueden lograr re posicionar sus empresas en el ánimo ciudadano, sin tener que utilizar otros esquemas para vender.
En Concreto, la capacitación laboral, de cualquier empresa es imperante, hoy los periodistas y medios, tenemos delante una gran oportunidad de actualizarnos, de revisar todo lo andado y en su caso poder reencausar el rumbo, al fin de cuentas nadie hace nada por el simple hecho de hacer, todo tiene una razón y si esta va encaminada a crecer juntos aportando para el bien común, no sólo resulta en una obligación, también es un placer reaprender para seguir creciendo.