Por Mario Castillo
Chetumal.-Acostumbrada a ganar escenarios sin importar hacer leña del “árbol caído”, la actual titular del Instituto de Educación para Jóvenes y Adultos en el estado de Quintana Roo, María Candelaria Raygoza Alcocer, echo tierra a su defenestrado antecesor Rafael Quintanar González.
Inflar la nómina, violentar la estructura orgánica, favorecer a sus allegados y hacer mal uso del equipo del IEEA, fueron las malas prácticas de Quintanar que dio a conocer la entrevistada, señalando un desorden en el ejercicio de sus funciones, y que le llevaron a ser obligado a renunciar.
“Hubo un desorden en el tema de la estructura orgánica del Instituto, lo que llevó a fallar un poco en el tema de las funciones, pues se asignaron puestos que no existen en el organigrama”, dijo al citar el caso particular de Cancún.
Raygoza Alcocer, acusó que en la zona norte el ex director creó seis coordinaciones adicionales que abultaron la nómina al crear figuras laborales que no existían, y que incluso se desconoce –aseguró- de que manera cobraban estas personas que fueron favorecidas arbitrariamente.
“De donde les pagaba los desconozco, no sé cómo les pagaba, no tengo conocimiento de ello y estamos en revisión todavía. Es un instituto amplio y hay muchas cosas que revisar para saber cuáles son las carencias, inventarios y deficiencias que hay”, señaló al justificar que aún no tiene una información precisa.
Expuso que quizá esto lo hizo Rafael Quintanar con la intención de darle una dinámica diferente al trabajo, pero acentuó que no fue lo correcto ya que violenta la Ley Orgánica del IEEA al sobrecargar las obligaciones en materia de recurso humano.
La funcionaria estatal añadió que Quintanar González incurrió también en mal uso de los recursos materiales propiedad del IEEA, ya que “sacó equipo de una Plaza Comunitaria para llevarlo a una Fundación, y cosas de esa naturaleza”, refirió.
Candy Raygoza presumió de ética, pero desnudó que dentro de las irregularidades cometidas por su antecesor también se detectaron algunas facturas y viáticos inflados.
“Hay ahí algunas observaciones en ese sentido, pero se está haciendo todavía esa revisión por eso no puedo precisar; y yo creo que también por ética, pero no soy yo la persona para dar esa información porque pues existe una Secretaría de la Gestión Pública y ellos ya se están encargando”, puntualizó al evidenciar el desorden que dejó Quintanar González.