Chetumal.- Fue en el 2007 cuando el sistema meteorológico nacional anunciaba la formación del poderoso huracán “Dean”, con categoría 5, el cual afectó el centro y sur del estado dejando destrozos por doquier sobre todo en el prometedor proyecto turístico “Grand Costa Maya” de Quintana Roo. Hoy a más de 8 años del citado incidente, las comunidades costeras que integran ambicioso proyecto aún no se recuperan de las afectaciones dejadas por el fenómeno natural y mucho se debe a la falta de apoyo por parte de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Sin tener una infraestructura de primer nivel como tienen otros destinos del Estado, sobre todo de la zona norte, sitios como Mahahual e Xcalak luchan día a día para poder mantenerse “vivos”.
La venidera temporada de Semana Santa está prácticamente a la vuelta de la esquina, siendo una de las fechas más esperadas por los prestadores de servicios ante la llegada de cientos de visitantes locales y nacionales que abarrotan las playas azul turquesa para pasar unos días de descanso a la par de dejar buena derrama económica.
Sin embargo existe un problema mayor en esta zona el cual es la falta de apoyo para su detonación; por ejemplo desde el pasado mes de diciembre los poco más de 200 cuartos de hotel están totalmente reservados para estas fechas lo que ha originado la molestia de varios turistas quienes les parece increíble que zonas como Mahahual carezca de infraestructura hotelera y mucho se debe a la falta de inversión y gestión por parte de las autoridades.
Empresarios turísticos del sur del estado, específicamente de la costa maya como Claudio Herrera Vivas señalan que el punto medular del tema es la falta de seguimiento de los proyectos turísticos por parte de las autoridades de los tres niveles. Y es que a Mahahual, se le considera como el corazón de la llamada Costa Maya, un corredor turístico en vías de desarrollo que incluye la integración de los centros de población de Pulticu, Xahuaxol y X-calak los cuales tiene bellezas naturales impresionantes donde muchas de ellas aún permanecen vírgenes a la espera de ser explotadas debidamente para fortalecer el turismo y crear un paraíso natural diferente, es decir crear una zona norte en pleno sur.
Claudio Herrera, consideró que uno de los principales problemas de Mahahual sigue siendo la conectividad, pues la única vía para llegar al destino es la terrestre ya que los turistas que arriban en crucero, rara vez son trasladados a la comunidad por lo que, no representan un beneficio real para los prestadores de servicios turísticos del lugar.
Hay que mencionar que en su momento autoridades estatales señalaron que el crecimiento para Mahahual está planeado para ser la zona más importante del corredor turístico de la Costa Maya, donde aún se estima contar con más de 120 mil habitantes en los próximos 20 años y una oferta de 25 mil cuartos de hotel, los cuales hasta el momento están muy lejos de la realidad que se vive.
Empero, el empresario, Carlos Pérez Quintal señaló que hace algunos años se anunció con bombo y platillo el proyecto para el desarrollo turístico de la zona la cual constaba de alrededor de 150 hectáreas de reserva que tiene el gobierno estatal en la zona de Mahahual.
En su momento Gina Patricia Ortiz Blanco, directora del IPAE, aseguró que un grupo de empresarios estaban interesados en adquirir los terrenos para consolidar un proyecto hotelero, pero al parecer ese interés nunca llego o más bien fue una mentira más para los habitantes de dicha zona.
Información proporcionada por actuales autoridades del IPAE señalan que el proyecto Grand Costa Maya fue anunciado en el año 2000, el plan original incluía un campo de golf asociado a un desarrollo inmobiliario en línea costera y zona continental; preveía la construcción de cuatro mil 857 cuartos de hotel en una primera etapa, palafitos en lagunas interiores y áreas arrecifales. Incluía también un parque temático y la construcción de canales de navegación eco turístico, que conectarían a las lagunas interiores y áreas comerciales, de servicio y de entretenimiento en la línea de costa.
Hoy en día los proyectos anunciados distan mucho de la realidad por lo que la costa maya seguirá esperando esas grandes inversiones para su detonación turística.