_ Fonatur fortalecerá al sector productivo con el potencial de carga del Tren Maya…
Por LT Berenice Núñez Rocha
(Asesora turística de Mar de Voyage)
Ciudad de México.- Cárdenas-Huimanguillo, en Tabasco; Othón P. Blanco-Bacalar, en Quintana Roo, y Champotón-Hopelchén, en Campeche, son los tramos en donde se identificaron cinco nodos importantes que concentran el 60 por ciento de la oferta agroalimentaria de los principales productos en el Sureste, de acuerdo a especialistas en la materia que trabajan en el diagnóstico de la red de carga, lo que vendrá a beneficiar al sector agropecuario de la región.
Y bajo ese contexto, Olga Vázquez, encargada del Programa Agroalimentario del Tren Maya, explicó: “Hay un déficit en infraestructura agroindustrial en el Sureste, por lo que los productos locales se comercializan principalmente como materias primas. En el diagnóstico de la red de carga, el Tren Maya permitirá detonar el potencial de transporte en los principales nodos productivos con inversiones enfocadas en centrales de abasto, terminales de carga y centros de transformación rural”.
Con lo que se garantiza que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) impulsará al sector agroalimentario en el Sureste a través del Tren Maya, proyecto que permitirá ofrecer una red de infraestructura de carga y transporte de alto potencial para fortalecer los mercados regionales, incrementar la conectividad e incentivar la exportación de productos.
Durante la presentación del Programa Agroalimentario del Tren Maya, donde participaron los equipos territoriales de los Tramos 5, 6 y 7 que comprenden el caribeño Estado de Quintana Roo, se plantearon los estudios y el mapa agroalimentario de la región, así como un diagnóstico de la red de carga que abarca las cinco entidades del Sureste.
En el caso específico de Cancún destacaron la importancia de que en esta ciudad estará ubicada la estación logística del Tren Maya que se convertirá en un centro de abasto de alimentos importante y permitirá incrementar la conectividad con mercados nacionales e internacionales, generando un escenario de inversiones potenciales para fortalecer al sector agroalimentario.
Concluyeron que en cuatro de los cinco estados que se encuentran en la zona de influencia del Tren Maya, el sector agroalimentario se coloca por delante de la actividad económica derivada del turismo, por lo que se visualiza que el sistema ferroviario tendrá un gran impacto en los mercados de la región, ya que actualmente más del 90 por ciento de la carga se mueve en camiones.
Para el año 2023 se prevé que el Tren Maya capte 6 de cada 10 toneladas de carga agroalimentaria, al tiempo que representará una reducción de costos logísticos y de transporte, aunado al incremento de un 4 por ciento en las exportaciones agrícolas de la región, donde tan solo en el 2018 se generaron 23.5 millones de toneladas de productos agrícolas, pecuarios y pesqueros.