Mario Castillo Rodríguez
Chetumal.-Será a más tardar el 31 de julio cuando las escuelas de nivel básico en Quintana Roo deban llegar a un acuerdo para determinar si modificarán su Calendario Escolar a 185 días, o continuarán impartiendo clase los 200 días habituales.
Así dio a conocer José Manuel Gil Padilla, delegado de la Secretaría de Educación Pública en la Entidad, quien reveló que a la fecha –por diversas razones- los maestros no han llegado a consensos para acordar si recortarán su ciclo de trabajo al frente de las aulas.
Destacó el funcionario federal que esto en razón de que muchos docentes ya tienen sus horarios preestablecidos para empatar el trabajo con sus actividades cotidianas, y el recortar el Calendario significa aumentar una hora al día frente al grupo.
Manifestó que la autoridad educativa del estado ya se encuentra trabajando al respecto en diversos puntos de la geografía quintanarroense para lograr acuerdos en los que nadie resulte afectado, y en su caso se establezca una modificación armónica al almanaque educativo.
Sin embargo, aseguró Gil Padilla que cada escuela goza de la libertad de manera particular de decidir si alargan o no su jornada laboral, aunque esto generaría conflictos con aquellos centros educativos en los que se tiene dobles turnos, ya que los profesores del vespertino estarían en el dilema de retirar alrededor de las 18:00 horas, o más.
“Hay problema por aquellas escuelas que tiene horario vespertino, entonces en ese caso chocaría con el horario de los de la tarde, porque tampoco será propio que los muchachos salieran en la noche, no es tan fácil y esas son las cuestiones que se están discutiendo”, agregó el Delegado de la SEP.
En este sentido, manifestó que estos acuerdos deben ser tomados de forma coordinada con los padres de familia, ya que serán ellos quienes deban ajustar también sus tiempos para no verse afectados incluso en sus diferentes compromisos laborales.
Aunque dejó en claro que una vez que se defina en cada escuela que calendario llevarán, este ya no podrá ser modificado repentinamente, pues entrarían en conflicto con la autoridad estatal y federal educativa. “No estamos jugando, lo que se defina tendrá que ser firmado de manera conjunta”.
Por último, dijo José Manuel Gil Padilla que de entrada el tema de la modificación al ciclo escolar causó sorpresas entre docentes y padres de familia, aunque a la fecha muchas escuelas lo están viendo como ventaja para incluir fechas de importancia en Quintana Roo, como en el caso del carnaval y otras festividades de esa naturaleza.