Por Paloma Wong
Chetumal.- Tras la aprobación de la reforma urbana para el estado de Quintana Roo, la Secretaría de Desarrollo Territorial Urbano Sustentable (Sedetus) considera que habrá una mayor responsabilidad y certeza jurídica para los desarrolladores.
La semana pasada, el Congreso del Estado aprobó la reforma urbana, que que consta de un par de nuevas leyes y reformas a otros ordenamientos en la materia con la finalidad de fomentar el crecimiento ordenado respetando la naturaleza y garantizando una mejor calidad de vida para los quintanarroenses a través de la construcción de viviendas dignas.
En este sentido, el titular de la Sedetus, Carlos Ríos Castellanos dijo que con ella los desarrolladores tendrán incentivos para concluir con sus desarrollos de viviendas, lo que brindará una mayor certeza a las familias al momento de adquirir un patrimonio.
“Esto dará mayor agilidad y certidumbre para que este fenómeno ya no se propague y hay incentivos para que esto no suceda y para que el desarrollador y los municipios lo puede hacer más agil en beneficio de los compradores”, afirmó.
Lo anterior, luego de que algunos fraccionamientos no han sido municipalizados ante la falta de servicios y conclusión de los asentamientos.
El entrevistado indicó que esta nueva Ley considera incentivos y sanciones, lo que permitirá que ahora sí los fraccionadores cumplan con lo que marca la Ley.
Cabe mencionar que, de modo particular, el objetivo de la nueva Ley de Acciones Urbanísticas, es el de reconocer y regular los procesos de expansión urbana, muchos de los cuales hoy día no encuentran cobertura, provocando serios problemas sociales, económicos y urbanos.
La nueva ley revisa los estándares normativos para asegurar un crecimiento de calidad: red vial, red de distribución de agua, infraestructura para drenaje y alcantarillado, sistemas de disposición de residuos.
Además, se establecen los estándares mínimos para asegurar las condiciones de habitabilidad. Por ejemplo, la vivienda popular no podrá tener un frente mínimo de seis metros ni un lote podrá ser inferior a 108 metros cuadrados, previendo su crecimiento progresivo.