Chetumal.-En un acto por demás inaceptable, despreciable y ruin, fue exhibido un integrante protegido y consentido del “gobierno del cambio” de Carlos Joaquín, a quien se le acusa de gozar de privilegios como la asignación de un elemento de seguridad pública a su cuidado personal y de su patrimonio.
Francisco Xavier López Mena, Rector de la Universidad de Quintana Roo (UQROO), fue denunciado por dar un trato inhumano a un elemento policiaco que se encuentra bajo su protección y cuidado, a quien tiene sin agua ni alimentos, mucho menos sin pagar viáticos.
Trascendió que el guardia de seguridad se encuentra asignado en el condominio Gaviotas, está marcada con el número 6-C, en una zona exclusiva de la Zona Hotelera.
Y es que fue mediante una denuncia ciudadana, donde s exhibió a Francisco López Mena, quien cuenta con servicio de escoltas personal, adscritos a la Secretaría de Seguridad Pública de Q.Roo, quienes aseguran estar hartos de sus malos tratos.
Por tal motivo,lanzaron una petición de intervención urgente al gobernador del estado, a fin de que sean atendidos, esto ante la situación que enfrentan de laborar en condiciones inhumanas.
Derivado de la denuncia, trascendió que al menos 500 policías de la SSP se encuentran abandonados a su suerte en la Zona Norte, sin viáticos, sin gasolina y sin seguridad moral o jurídica para atender las incidencias delictivas. Se dice que les deben viáticos acumulados de diciembre, enero, febrero y marzo de este año, convirtiéndose en una situación insostenible.
Por lo tanto, al parecer se espera hará una manifestación de brazos caídos, debido a los excesos y desatenciones por las que son objeto.
En ese tenor, coinciden en que vuelven a revivir la situación que enfrentaron durante las administraciones priístas, sobre todo con Roberto Borge Angulo, por lo que aseguran no han sentido la “mano amiga” de Joaquín González, sino todo lo contrario, por malos manejos desde el arribo de Alberto Capella Ibarra, ex Secretario de Seguridad Pública en Quintana Roo.
Finalmente, dijeron sentirse “maniatados” al verse imposibilitados de expresar alguna queja o inconformidad, ya que toman represalias en su contra, o son acusados de ser incitadores a manifestación.