Chetumal.-La tarde de este lunes salió a la luz la presunta violación de un menor estudiante de sexo masculino que cursa el 5to grado en la escuela primaria Fernando Figueroa Guardia, en la colonia Guadalupe Victoria de Chetumal.
Según versiones de madres de familia los hechos se registraron el pasado miércoles 9 de marzo, y fueron ocultados por el director del plantel Adiel Beltran Aké, junto con el subdirector de nombre Alain; quienes al parecer hicieron firmar a la madre del menor afectado papeles en blanco aceptando que no había culpa ni daño alguno.
Es de agregarse que la madre del menor se negó a proporcionar información por miedo a que tanto ella como su hijo sean blanco de burlas, críticas y señalamientos malintencionados.
Se habla de una presunta violación ya que otro alumno del 6to grado le obligó a prestarse a “sucios actos” al interior del baño en horario escolar. Versiones de los demás alumnos que corrieron como pólvora dentro del centro educativo, afirman el niño de quinto grado fue obligado a hacerle sexo oral a su agresor compañero de escuela.
Las denunciantes aseguran que la madre del niño agraviado habló con el director y el subdirector para tratar el caso, mismos que le obligaron a firmar documentos para evitar que la situación salga a la luz pública, toda vez que dicha escuela de tiempo completo está en proceso de concurso para acceder al Programa Escuelas de Calidad, a fin de obtener recursos por el orden de 500 mil pesos para su mejora.
“La mamá del niño nos dijo que ellos dos la convencieron para que la cosa quedara entre ellos y no se diera a conocer públicamente para que no afecte la solicitud de dinero que estaban haciendo, pero nosotras le dijimos que era mejor que se tratara con las autoridades para que se dé una verdadera solución del caso que nos preocupa a todos los que tenemos hijos estudiando en esta escuela”, agregó una de las madres de familia que pidió el anonimato.
A dicha escuela, la tarde de este lunes arribaron elementos de la Policía Ministerial, Policías Municipales, así como gente de la SEyC, quienes dijeron a las madres de familia que se encargarían del asunto de manera particular, pues no es la primera vez que el estudiante de sexto grado abusa de sus compañeros y ofende física y verbalmente demostrando una conducta que no es la de un niño normal.
La madre y el menor –acompañados de personal de psicología- fueron trasladados en una unidad de la UNEPAV a presentar la denuncia correspondiente para el deslinde de responsabilidades, por lo que seguramente se procederá en consecuencia también en contra de los maestros que ocultaron tan bochornoso suceso.
Ante tales circunstancias, un grupo de madres amenazaron no sólo con no llevar a sus hijos a la escuela por miedo a que sean objeto de algún tipo de abuso similar, sino con impedir el acceso al plantel a los demás estudiantes en tanto no se esclarezca el caso, y cesen a los maestros involucrados.
“Siempre pasan cosas de ese tipo y tanto el director como el subdirector hacen como si nada sucediera aquí. Nosotras ya no estamos dispuestas a seguir aguantado esta situación, vamos a cerrar la entrada al plantel para evitar que alguien más salga dañado; es por la seguridad de nuestros hijos porque la dirección escolar nunca hace nada”, sentenció otra de las angustiadas madres de familia.