Por Malixpek
Ante la crisis por el coronavirus, los gobiernos de todos los países han adoptado diversas medidas de seguridad para la salvaguarda y protección de la salud de la población mundial.
Así pues, hemos visto gracias a la magia de la internet y las modernas telecomunicaciones, desde ciudades vacías del otro lado del mundo, los esfuerzos de miles de médicos y especialistas, así como la de los gobiernos por combatir el mal.
Más cerca de nosotros, hemos visto la campaña del gobierno mexicano enfrentar el día a día en medio de vendavales entre los opositores del Estado y los defensores del mismo.
Un poco más cerca, vimos también gracias a la tecnología, como patrullas con oficiales a bordo ahuyentan a ciudadanos de las playas yucatecas.
Pero, mucho más cerca, aquí mismo, estamos viendo lo que nadie espera ver (valga la redundancia), la minimización de este severo problema e incluso, la satirización por parte del Estado, del mismo que se supone, es el encargado de liderar los esfuerzos para proteger y salvaguardar la salud de los quintanarroenses.
Después de darse a conocer el primer caso confirmado en Cancún, luego de una serie de rumores desmentidos una y otra vez por el Estado, el Gobernador mismo inició una campaña de información con mensajes en las redes sociales oficiales.
El pasado 14 de los corrientes, el mismo día que el gobierno federal pidió a las entidades públicas de los tres niveles de gobierno, así como a la empresa privada que suspenda actividades no esenciales, Carlos Joaquín González envió un mensaje grabado en video, llamando a la tranquilidad y la calma.
Ese mismo día, mientras el gobierno federal acentuaba las medidas de seguridad, la secretaria de Salud del Estado, Alejandra Aguirre imitaba a su jefe llamando a la población a la normalidad.
Y detrás de ella, salió Marisol Vanegas la titular local de turismo a pedir que no se cayera en pánico porque hay en este momento más de 330 mil turistas en Quintana Roo. Finalmente, Quintana Roo vive del turismo.
Sin embargo, la cereza del pastel de esta campaña de mensajes, lo puso la titular de Comunicación Social (y se supone que es), la que persona encargada de manejar la imagen del Gobierno de Quintana Roo y de manera particular, del gobernador, Haidé Serrano Soto.
A doña Haidé se le ocurrió o le (recomendaron, no se sabe) producir también su video. Y esta inteligente señora, pese a la gravedad del tema, sin importar la seriedad que se le debe dar desde cualquier instancia del Estado, no sólo llamó, sino exhortó e invitó a la ciudadanía a salir a la calle, ir al cine e incluso a la playa.
Mientras en Yucatán las autoridades de seguridad vaciaban sus playas por el estado y la magnitud que ha tomado la situación, y mientras 10 estados del país suspendían labores no esenciales y actividades educativas, en Quintana Roo la titular de comunicación social hacía exactamente lo opuesto.
Y ya encarrerada la Señora, dos días después sacó su nuevo video, ahora, no invitando a salir a la calle, sino satirizando la crisis del coronavirus con música guapachosa, invitando implícitamente a la fiesta, al “deschongue” diría la sabia popular.
Resulta que en su nuevo video, a la señora Haide Serrano se le ocurrió reunir a todo su staff personal y les dijo: ¡órale! Al cuerpo lo que pida, aun que nos caiga encima el coronavirus! Y que se suelta la música y vámonos.
No dudamos que la intención sea buena, pero sin duda alguna, de buenas intenciones está lleno el camino al infierno, reza el dicho.
Y no es que queremos denostar o politizar, o señalar por señalar, los esfuerzos que hace el Estado, buenos o malos, para enfrentar esta emergencia, no. El punto es, que si esta es la seriedad que se le pone a una crisis como la pandemia del coronavirus… ¿en manos de quién estamos?
¿No podía la señora Serrano pedir la asesoría de los profesionales de la salud para hacer una campaña de información seria? ¿No hay quien le pueda poner un alto a sus ansias de estar frente a los reflectores?
Un Estado no se puede manejar a base de ocurrencias y el combate del coronavirus, su contención y la protección de los quintanarroenses no es un concurso de a ver quién hace, dice o graba el mejor videochiste sobre el tema.
Si esta es la respuesta de Carlos Joaquín a la emergencia del coronavirus…¿En manos de quién estamos?
Chetumal, Q. Roo. 17 marzo 2020