Chetumal.-El derrame de una supuesta sustancia líquida en el área de Epidemiología, ocasionó sorpresivo movimiento y locas carreras entre el personal de la Clínica del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Chetumal, para desalojar a los trabajadores de algunas áreas del centro hospitalario e incluso uno que otro derechohabiente; a pesar de que el informe oficial de la Delegación indica que se trató de una simple dosis de “chile habanero” vertido en el lugar equivocado.
Y aunque posteriormente el director del nosocomio capitalino, Arturo Toledo Miranda, informó que se trató de un simple derrame en el área de epidemiología, el cual –aseguró- se neutralizó inmediatamente, el hecho no impidió que unas 20 personas fueron desalojadas de un ala del ISSSTE, pues el olor era intenso y causaba molestias a quienes respiraron las emanaciones.
“Le pedimos a la gente que saliera despacio y llamamos a personal de Protección Civil de la clínica para cerrar el área y realizar el aseo. Hasta ahora no sé qué sustancia es pero hay formol, xilol y otros que generan este malestar”, dio a conocer el Directivo del Hospital al ser entrevistado por los medios de comunicación.
No obstante, anuló la posibilidad de que alguien saliera intoxicado, e indicó que el desalojo de gente fue de manera preventiva para evitar que la nube de gas que despedía el supuesto líquido vertido en el suelo de forma accidental causará mayor afectación en los ahí presentes.
Y es que según el informe girado por la Delegación de dicho instituto de seguridad social, el médico Julio César González Aguilar, estaba haciendo “talacha” su escritorio en el área de epidemiología, y por equivocación tiró al piso “un recipiente de chile habanero en polvo”, y eso derivó en la propagación del mismo
Sin embargo, el Doctor Toledo declaró se hará el reporte respectivo para hacer llegar a los mandos delegacionales, mientras todo fue resuelto con otra dosis de limpieza que el personal encargado realizó para disipar el olor, y las cosas regresaron a la normalidad después del susto ocasionado por dicha sustancia indispensable para “la botana” de quienes trabajan en el área de gobierno.