Felipe Carrillo Puerto.- Daños materiales por alrededor de 50 mil pesos fue el saldo de un accidente carretero suscitado la mañana de este miércoles, cuando el chofer de un camión repartidor de agua purificada dormitó sobre el volante y perdió el control de la unidad motriz y termina saliéndose de la cinta asfáltica de su costado derecho.
Este hecho sucedió a escasos 15 kilómetros de esta cabecera municipal, el chofer resultó con golpes menores en tanto que la pesada unidad resulto con daños materiales.
Cerca de las 10:30 horas, automovilistas que arribaron a esta ciudad alertaron a los cuerpos de emergencia sobre un accidente carretero registrado a la altura del kilómetro 149 + 500 de la carretera federal Reforma Agraria – Puerto Juárez, tramo Tulum – Felipe Carrillo Puerto.
En el lugar se pudo apreciar que el vehículo accidentado se trata de un camión repartidor de agua purificada de la empresa Cristal, unidad de la marca International, tipo torton, color azul, con placas de circulación TB-3121-B del estado de Quintana Roo y era conducido por Jonathan Luna.
De acuerdo a la información recabada en el lugar, el operador de la pesada unidad circulaba de sur a norte, habiendo partido de esta ciudad con el objetivo de surtir los establecimientos de la zona rural, cuando el cansancio provocó que “pestañara” por unos instantes y ello motivo su salida de la vía de rodamiento por su costado derecho.
La pesada unidad avanzó más de 60 metros dentro de la maleza y por fortuna el chofer logró maniobrar de forma correcta para evitar que el camión terminara volcándose, sin embargo resultó con daños materiales de consideración.
Al lugar arribaron paramédicos de la Cruz Roja para brindarle los primeros auxilios al operador del camión, quien para su fortuna únicamente resultó con golpes menores en diferentes partes de su cuerpo, por lo que no fue necesario su traslado al hospital general.
De igual manera hicieron acto de presencia los elementos de la Policía Federal División Caminos que se hicieron cargo de realizar el peritaje para el deslinde de responsabilidades, y posteriormente ordenaron el traslado de la pesada unidad al corralón federal para los fines correspondientes.