Por Julián Puente
Chetumal.-El delegado en Quintana Roo de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Blanco Pajón informó que los asentamientos humanos irregulares que se ubican en el estado, representan un serio problema de salud pública, sobre todo por la carencia de sistemas de drenaje, lo que ocasiona que los desechos los viertan directamente en el subsuelo.
Explicó que dichos asentamientos son un aura de contaminación, pues los desechos que produce cualquier poblado ensucian todo depósito acuífero cercano y generan problemas ambientales y de salud.
Por ello subrayó que es preciso organizar una visión conjunta y de largo plazo con el fin de mantener y ampliar las zonas de captación, resolver el problema de las vialidades, captar agua pluvial en zonas verdes urbanas y controlar el crecimiento de los asentamientos regulares.
El funcionario federal dijo que los asentamientos irregulares emiten aguas principalmente con desechos fecales que son los que tienen los organismos llamados «coliformes», dañinos para la salud en cantidades mayores a las que indica la NOM-127, que son mil bacterias por litro.
Dijo que tanto en el área de verificación de agua potable como en el de residual se hacen dos tipos de análisis, uno físico químico, donde se determina la presencia, cantidad y tipo de residuos sólidos y químicos; otro microbiológico, donde se analiza también la presencia, cantidad y tipo de bacterias y microrganismos.
Explicó que el agua contiene dos tipos de microorganismos, los llamados totales o mesófilas, que son comunes y no causan ningún daño para el hombre y los coliformes o fecales, que sí son dañinos.
Lamentó además que ante las condiciones irregulares de dichos asentamientos es imposible invertir recursos para introducir sistemas de drenaje que eviten la contaminación del subsuelo.
Blanco Pajón mencionó que la contaminación que generan los asentamientos irregulares entra en el grupo denominado “contaminación difusa”, que representa un serio riesgo para las personas que viven en dichos lugares.
Finalmente expuso que el desarrollo no planeado de las comunidades ha sido un punto de riesgo para la salud de sus habitantes, ya que desconocen las distancias salubres entre una letrina y un pozo de agua, lo que puede llegar a ocasionar un foco de infección debido a que muchas enfermedades utilizan el agua como vehículo de transmisión.