Efecto Mariposa
El Gobierno de Quintana Roo, encabezado por Carlos Joaquín González, no ha podido inyectar los recursos económicos suficientes para favorecer el crecimiento económico del Sector Ganadero, pues los $ 55.8 millones que invirtió la SEDARPE (Secretaría de Desarrollo Agropecuario, rural y Pesca) en 2019, principalmente en los programas de capacitación, proyectos prioritarios, programas en concurrencia y la dotación de insumos, son insuficientes para frenar la disminución del hato ganadero e implementar estrategias efectivas para la producción de alimentos para bovino, que puedan almacenarse y conservarse hasta los meses de estiaje; que por los cambios de los tiempos y la disminución de las lluvias, provocan la pérdida total de pastizales, y la sequía de jagüeyes y abrevaderos.
Aún más grave ha sido la afectación causada a la economía de los productores ganaderos; la política del Gobierno Federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador, ya que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 decidió disminuir los recursos destinados al sector ganadero en un 30%, lo que incidió en la ganadería en Quintana Roo, pues los ganaderos de Bacalar no recibieron recursos para hacer frente a la sequía y mucho menos para la mejora de activos productivos, en caso de presentarse el próximo año la escasez de lluvia, será aún más difícil obtener recursos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) pues al sector ganadero le aplicaron otro recorte del 30% en el Presupuesto de Egresos dela Federación en 2020, situación que impacta directamente en los productores ganaderos del Municipio de Bacalar.
La ganadería en Quintana Roo ha sufrido un fuerte revés con la disminución del hato ganadero a causa de los gastos realizados por los productores para hacer frente a la sequía, lo que les obliga a vender vacas en gestación, pues la demanda de becerros se encuentra estancada, por problemas relacionados con el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos, sin que las autoridades de la (SADER), cumplan con su responsabilidad de aplicar recursos para enfrentar los efectos de la sequía, y en el mismo sentido incumplió con el programa de “Crédito Ganadero a la Palabra”, donde supuestamente habrían de entregar 10 vaquillas y un toro, así como recursos para limpieza de potreros y mejora de activos productivos.
El Programa estrella de la SADER: “Crédito Ganadero a la Palabra”, a pesar de que es uno de los 30 programas prioritarios del Gobierno Federal, fue un completo fracaso, pues tenía la meta de repoblar el hato ganadero, dotando a cada productor del Sureste de México, 10 vaquillas preñadas y un toro; menos del 1% de los 4,500 productores ganaderos registrados en el SINIIGA (Sistema Nacional de Identificación Individual de Ganado) fueron beneficiados con este “Programa”, siendo totalmente engañados que fue un programa a medias ya que tan sólo les recibieron 4 vaquillas
El Presidente de la Asociación Ganadera Local General, Ganaderos Unidos de Bacalar, Federico Bucio Martínez, en el convivio navideño con el gremio ganadero, acusó que en la Administración que encabeza el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a las Organizaciones Ganaderas se les han negado apoyos de manera sistemática; dentro de los programas de desarrollo del sector y como ejemplo de esta dinámica, informó que a sus agremiados solo les llegó a dos productores el Programa, “Crédito Ganadero a la Palabra”, una vaca a un productor y 4 vaquillas sin toro al otro, señalando esta actuación como ilegal pues la Ley Federal de Organizaciones Ganaderas los contempla como sujetos de apoyo, y por otro lado los recursos que ha destinado el gobierno del estado y el municipio de Bacalar son insuficientes, ya que la sequía les ha golpeado muy duro ocasionandoles enormes pérdidas.
El temor entre los ganaderos por qué 2020 sea un año de sequía no parece ser desestimado por la CONAGUA, ya que en relación con el fenómeno meteorológico del Niño el cual contiene periodos cíclicos entre 3 y 8 años en los cuales hay incremento en la temperatura superficial del mar en el Océano Pacífico Oriental y el enfriamiento en las costas de Sudamérica provocando abundantes lluvias en Asia, fenómeno natural que al concluir cambia la circulación de los vientos y da lugar al inicio del periodo de la niña, lo que podría provocar sequías extremas en Centro y Sur América e inundaciones o sequías en Asia.
Es necesario que el Estado de Quintana Roo asuma la responsabilidad de favorecer el crecimiento de la productividad de los ganaderos, mediante estrategias que contribuyan a garantizar el acceso a agua para abrevaderos, así como la de la producción de alimentos susceptibles de ser almacenados como el Maíz, o los forrajes ensilados como lo es el Sorgo; un alimento con alto contenido proteínico, pues la ganadería en Bacalar a pesar de haber observado un crecimiento muy importante, se ha quedado rezagada con su contraparte en los Estados Unidos de Norteamérica, que es el principal mercado de becerros para Quintana Roo, y la mayoría de los productores carece de tractores, métodos modernos para conservación del agua y de sistemas de riego para la producción de pastos forrajeros y granos.
El Presidente Municipal de Bacalar: Alexander Zetina Aguiluz ha mantenido una agenda muy apegada a las Organizaciones Ganaderas, a las que ha apoyado con sementales para la mejora genética y acudiendo periódicamente a las comunidades donde los ganaderos fueron más afectados con la sequía, apoyándoles con insumos, equipos y principalmente con pollinaza, lo que ha dado un poco de respiro a los productores, sin embargo, debería desde este momento implementar acciones para prevenir los efectos de la sequía durante el estiaje del 2020