Chetumal.- Debido a la falta de un título profesional que expide la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la aparición de Universidades “Patito” han propiciado el incremento en el número de gente capacitada para ocupar cargos relevantes en la política, dependencias federales, estatales, municipales y privadas, reveló, Emiliano Joaquín Oliva Alamilla, Presidente de la Asociación de Profesionistas de Quintana Roo, quien aseguró que a la fecha solamente cinco mil gentes en todo el Estado cuentan con una cédula profesional.
Explicó que desde hace un año en que fue designado Presidente de la Agrupación, se le pidió a los responsables de los colegios de organizaciones de profesionistas, enviar un padrón de las personas que contaban con un título profesional y quiénes eran pasantes; sin embargo, hasta la fecha han sido pocos los que han cumplido con esta petición, por lo que solamente existen cinco mil profesionistas debidamente reconocidos y certificados por la SEP en estos momentos.
Agregó que tan solo en Quintana Roo existe 28 colegios y un buen número de organizaciones que cuentan con profesionistas en los diez municipios del Estado, especialmente Benito Juárez, Solidaridad, Tulum y Othón P. Blanco que no han cumplido con esta disposición, por lo que no se puede hablar cuántos políticos, servidores públicos, catedráticos, contadores e ingenieros; entre otros, cuentan con un título profesional.
Oliva Alamilla, indicó que el universo es grande ya que un buen número de profesionistas, servidores públicos y políticos que hoy ocupan cargos importantes no pudieron titularse, primero porque al salir de la universidad empezaron a trabajar y poco a poco fueron ascendiendo hasta obtener jugosos salarios, mientras que otros no lo hicieron por faltas de recursos económicos y algunos más por desidia y falta de tiempo.
En este orden mencionó que esto, ha propiciado que estos profesionistas que no están titulados y otros que están estudiando en universidades no reconocidas por las autoridades educativas, prácticamente no puedan ocupar un cargo jerárquico en el servicio público, política e incluso la iniciativa privada, por la llegada de firmas comerciales de nivel internacional, que exigen gente titulada y capacitada para ocupar puestos de primer nivel.