Por Salvador Pérez Hernández.
Miguel Alemán, Bacalar. El operativo conjunto realizado por el Ejército Mexicano, Policía Federal de Caminos, Policía Ministerial de Quintana Roo, Policía Rural y Policía Municipal de Bacalar en la comunidad de Miguel Alemán el día 20 de agosto del presente, dando como resultado la detención de un solo ganadero por el delito de usar un supuesto pantalón de la Armada de México, ante una evidente falta de criterio que sólo derivó en la mofa hacia las fuerzas castrenses por parte de los verdaderos delincuentes.
El pasado fin de semana se realizó un operativo conjunto de las corporaciones castrenses y policiacas mencionadas, en la comunidad de Miguel Alemán, pueblo cuyos habitantes viven de la ganadería, trabajo honrado expuesto a los delitos de abigeato y asalto a mano armada, al mismo tiempo que ha habido quejas de los habitantes por el constante accionar de armas de fuego, por lo que solicitaron al Delegado Municipal realice las gestiones para que se realice un operativo conjunto; tanto de fuerzas federales, como estatales y municipales a fin de que se den a la tarea de encontrar a los infractores de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos , no para que efectúen detenciones arbitrarias donde la constante es la violación a los Derechos Humanos.
Como un ejemplo de las violaciones a los Derechos Humanos cometidas por las fuerzas castrenses y policiacas, se evidenció éste operativo conjunto, con uso y abuso de violencia e intimidación, ya que en lugar de detener a los delincuentes, estas milicias detuvieron en la calle a cinco conocidos ganaderos, quienes estaba llegando al pueblo de las parcelas, después de una dura jornada laboral, tomando un descanso en la sombra de un naranjo agrio, donde fueron víctimas de vejaciones por parte de los elementos armados.
A una distancia de 20 metros se detuvieron cuatro patrullas de la Policía Rural quienes observaron a los ganaderos durante unos cinco minutos, momento en que arribaron dos patrullas de la Policía Federal de Caminos, un Hummer del ejército mexicano y una camioneta de agentes ministeriales, acto seguido un agente de la policía ordenó a los ganaderos que se detengan para una revisión, intimi dándoles con armas de fuego, mientras que elementos de las fuerzas armadas cortaban cartucho, los policías ordenaron que abrieran un coche que estaba estacionado, para revisarlo exhaustivamente, en busca de armas y droga, y mientras los militares continuaban apuntando sesgadamente con las armas de fuego, les ordenaron que levantaran las manos, revisándolos, zapatos, calcetines, gorras, trusas, pantalones y camisas.
El no encontrar ni drogas, ni armas de fuego provocó que los elementos policiacos se fastidiaran en extremo amenazando a éstos ciudadanos con remitirlos a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Quintana Roo, ya que los ciudadanos incrédulos por el trato humillante recibido se quejaban de que ese proceder era un abuso de autoridad y una violación a sus Derechos Humanos, por presumir que son delincuentes; sólo por el hecho de estar sentados en una sombra en la vía pública.
Por otra parte los Agentes de la Policía Ministerial hablaron por radio a la Central policiaca y pidieron verificar los documentos de los vehículos que se encontraban estacionados, además pidieron que se verifique los nombres de quienes sin cometer delito alguno fueron tratados en todo momento como delincuentes, para verificar si tienen una orden de aprehensión.
Una vez comprobada la inocencia de los detenidos, les dijeron que podían bajar las manos y les exigieron que la próxima vez que la autoridad les detenga, tienen que ser extremadamente respetuosos, y que no tienen derecho a cuestionar a la autoridad, los soldados cuando detectaron que el pantalón que vestía uno de los ganaderos; decía armada de México cortaron cartucho y le apuntaron, diciéndole que el usar un pantalón era un delito igual al de portar arma de fuego, fue cuando un agente de la policía ministerial le colocó esposas en las manos por la espalda, procediendo el Director de la Policía Rural a ordenar que el campesino que vestía el supuesto pantalón de la Armada de México, fuera subido a una camioneta – patrulla, para unas cuadras más adelante cambiarlo a una patrulla Avenger para que sea trasladado a la Ciudad de Chetumal.
El campesino detenido por portar un pantalón de la Armada de México, fue entregado al Juez Calificador del Municipio de Othón P. Blanco, a quien le impusieron una multa de $ 1,500.00 y rompieron el pantalón.
Este episodio muestra la futilidad con que se comportan las fuerzas castrenses coordinadas con las fuerzas policiacas, quienes en lugar de combatir a los cárteles de la droga, narcomenudistas, roba ganados, y delincuentes del fuero común, muestran una falta incomprensible de criterio, violentando los Derechos Humanos consagrados en nuestra constitución que específicamente menciona; “Nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad competente, que funde y motive la causa legal del procedimiento”.