Por Mario Castillo Rodríguez
Chetumal.-Comparado con el 2015, los niveles de empleo en el ramo de la construcción se encuentran por debajo de las expectativas, al grado de que a la fecha existe en la entidad alrededor de un 40 por ciento de subempleo, sobre todo considerando que en épocas atrás el ramo contaba con 280 mil trabajadores, y a la fecha los números no rebasan los 90 mil.
Existe una necesidad de inversión en el sector, ya que lo que ha propiciado que las cifras estén a la baja es principalmente la volatilidad financiera a nivel internacional, y que limita sobremanera la inversión extranjera en el estado de Quintana Roo.
A decir del secretario general del Sindicato de Trabajadores, Obreros y Empleados de la Industria de la Construcción (SITEC), José Juan Chilón Colorado, son 350 obras que ya están listas para arrancar y que se han visto también afectadas en los últimos años por leyes ambientalistas y demás disposiciones de tipo legal.
Manifestó que uno de los sectores más privilegiados con la generación de desarrollos es el de la construcción, pues de este depende la edificación de plazas comerciales, fraccionamientos, hoteles y demás relacionados con el detonante económico que de forma conjunta impacta a todos por igual al generar beneficios.
No obstante, dijo Chilón Colorado que la tabla de salvación para el ramo de la construcción fue la inversión pública, lo que permitió salvaguardar con inversiones de los tres órdenes de gobierno cerca de 50 mil empleos directos.
“La construcción se divide en tres grandes rubros; la inversión extranjera directa, la inversión privada directa local directa, y es esta última la que se ha convertido en la más fuerte. Es la que nos genera cerca del 50 por ciento de empleos a nivel estatal, sino fuera por ella estuviéramos peor”, sentenció el dirigente sindical de la construcción.
Tras señalar que el Sindicato de Trabajadores, Obreros y Empleados de la Industria de la Construcción cuenta en Quintana Roo con 4 mil 500 afiliados, destacó que uno de los empleos mejor pagados en la entidad es precisamente el de la construcción, “pue el que menos gana recibe un sueldo semanal cuando menos de 1 mil 800 pesos”, puntualizó.
Por último, indicó que para este 2016 se espera que se mantenga el mismo porcentaje ya que las obras, al menos del sector público, fueron programadas desde diciembre de 2015 y eso les da un aliciente para que las cifras no continúen a la baja al menos por este año.