Chetumal.-En colonias urbanas de Chetumal, tres de cada 10 mujeres sufre algún tipo de violencia considerada grave, mientras que en comunidades rurales la incidencia es de seis, siendo la pareja el principal agresor, aunque estos actos también involucran a otros miembros de la familia, como los padres.
Por ello se prevén estrategias de combate integral a dicha problemática que ha derivado en feminicidios, indicó la presidenta de la Comisión de Salud y Asistencia Social del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, Mayuly Martínez Simón.
Recordó el caso reciente de una mujer que fue brutalmente asesinada por su ex pareja sentimentalmente el fin de semana pasado en el Fraccionamiento Caribe, de Chetumal.
Asimismo, comentó que en Othón P. Blanco, en los últimos cinco años han aumentado un 45 por ciento los delitos de violaciones contra la mujer, siendo que en uno de cada tres de estos delitos no se detuvo a ningún presunto violador, de acuerdo con el informe “La Seguridad en Vilo: Quintana Roo en la espiral de la violencia”, de la Asociación de Autoridades Locales de México A. C.
Añadió que es en las comunidades rurales del municipio donde es más grave la violencia contra las mujeres. Citó el estudio “Diagnóstico sobre la situación de la violencia hacia las mujeres indígenas del municipio de Othón P. Blanco”, realizado por el DIF municipal, en el que se señala que en 36 comunidades rurales del Municipio ocurrieron el 48 por ciento de las agresiones contra las féminas.
“Mientras que en las colonias urbanas de Chetumal, tres de cada 10 mujeres sufren algún tipo de violencia considerada “grave”, en las zonas rurales la proporción aumenta a seis de cada 10, siendo los miembros de la familia los principales agresores, principalmente la pareja, protagonizando el 40 por ciento de los casos, seguido por alguno de los padres, con el 23 por ciento.
Comentó que las comunidades de Xul-Ha, Nachi Cocom, Morocoy, Huay Pix, Calderitas, Cocoyol, La Unión, Palmar y Sergio Butrón Casas, ocupan los primeros nueve lugares de Violencia de Género.
Manifestó que para combatir este problema, adicional a la impartición de talleres de concientización entre la ciudadanía, es importante capacitar en perspectiva de género a las autoridades responsables en la impartición y administración de justicia, pues es urgente la revisión del actuar de los jueces para que no dejar impunes a los agresores.