Cancún.- Aunque ya fue creado, el Instituto contra las Adicciones en Benito Juárez está a la espera que le asignen recursos, económicos y materiales para su operación, según dio a conocer su director, Óscar Francisco Guzmán Cerecero.
Entrevistado hoy viernes, el funcionario destacó su experiencia de más de 15 años de trabajar contra las adicciones, «no estamos en una lucha contra las drogas, el alcohol; nuestra batalla es contra las adicciones. La adicción no solo es la droga y el alcohol, sino también el juego, la comida, la codependencia», explicó.
Dijo que, acorde a la política de austeridad, se busca ahorrar al no rentar espacio para la instalación de oficinas, pero están a la espera que el municipio les asigne un lugar. Promete que encontrarán atención a cualquiera que así lo quiera, además de los diferentes programas de prevención, a dónde canalizar al adicto, porque hay muchas organizaciones que se dedican a tratar las diferentes adicciones.
Justificó que el Instituto se dedicará la prevención por medio de sus programas, de canalizar con especialistas a los que necesiten ayuda, porque se trata que ellos así lo deseen, no de obligar a nadie que no quiera rehabilitarse.
Informó que, por ahora, no se puede hablar de números, ni del presupuesto, ni de las estadísticas, hasta que esté formalizado el proyecto.
Al hablar de la problemática que vive Cancún en cuanto al tema de las adicciones, el funcionario municipal reveló que, por ser ciudad turística, se presta para muchas adicciones, pero esperará a que se haga un censo para dar con certeza dichos números.
Eso sí, dijo que «somos los primeros lugares en alcohol, en cocaína, en la marihuana, en el juego, en codependencia, en niñas embarazadas por debajo de los 15 años, en todo tipo de adicciones, de suicidios”.