Playa del Carmen.- A ocho días de haber iniciado su administración, la presidenta municipal de Solidaridad, Laura Beristain Navarrete, aseguró haber descubierto ya algunas “sorpresas” en la nómina, además de algunos convenios ficticios realizados por el gobierno anterior.
En entrevista, la edil indicó que por ahora se guardará los detalles, pues cuentan con otros 50 días para hacer un diagnóstico de cómo recibieron el Ayuntamiento
“Ya me encontré con algunas sorpresas, en las nóminas de recursos humanos, hicieron convenios ficticios, hay varias cosas ahí, vamos a reservarlas de momento”, declaró.
Adelantó que el 30 de noviembre contarán un reporte de las observaciones que se realizan en todas las áreas, para “deslindar a este gobierno de cualquier responsabilidad que se pudiera imponer”.
Tal como afirmó en su primera rueda de prensa después de las elecciones, acusó de que al parecer existe un segundo convenio suscrito con Aguakan, tema que todavía se analiza.
“Es casi seguro que de 10 personas que me encuentro, nueve preguntan cuándo se revoca Aguakan”, afirmó.
En tanto se decide su permanencia, solicitarán que la concesionaria cobre de acuerdo al salario de los mexicanos, ya que “Dan mal servicio, de mala calidad y un precio abusivo”.
Cabe aclarar que actualmente las tarifas del agua las fija la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA).
LE SUGIRIERON GABINETE POLICIACO
Por otro lado, confirmó que en la reunión sostenida días atrás con el secretario de Seguridad Pública, Jesús Capella Ibarra, y el secretario de Gobierno, Francisco López Mena, le sugirieron un gabinete para la policía municipal, pero ella les contestó que ya lo había nombrado.
“Yo platiqué con (Alfonso) Durazo (futuro secretario de Seguridad Pública federal) en tres reuniones, con el gobierno electo federal, que me piden respetar la autonomía municipal”, detalló la presidenta municipal.
“Ya dialogué con Capella y López Mena y se los hice saber. Ellos me dicen lo del Mando Único. Ellos me sugirieron un gabinete de la policía municipal”, prosiguió. “Yo les dije ‘ya hablé con Durazo y nombramos el nuestro’, además ya nombramos a un encargado de despacho (Martín Estrada Sánchez) y, ya vieron, la recepción fue buena”.
Aseguró que estos nombramientos no eran capricho suyo, sino que responden a la exigencia ciudadana de resultados.
Reiteró que no busca problemas, y que actualmente hay muchos “teléfonos descompuestos” en el diálogo con el gobierno federal electo, por lo que esperará a que Andrés Manuel López Obrador esté en funciones para tener una respuesta real en este rubro.
Por último, sobre posibles despidos, indicó que es parte normal de un cambio de gobierno, en que se va el equipo que perdió la elección y llega el nuevo, pues no se puede engrosar la nómina. Nadie debiera desesperanzado, pues existen bolsas de trabajo en la iniciativa privada, añadió.