Chetumal.- Una semana después de celebrarse los comicios federales y a tres meses que el gobernador Betoborge ofrezca su V informe de gobierno, el ambiente político en Quintana Roo se embulle de manera sorprendente, se rompe lo rutinario y se presume que en los venideros meses- antes de enero del 2016-, la “polaca” viva en su máxima expresión en la geografía estatal, principalmente en Cozumel, Chetumal, Playa del Carmen y Cancún.
Hace dos días el envalentonado alcalde de OPB, Eduardo Espinosa Abuxapqui alzó la mano, “quebró” las reglas no escritas de lealtad hacia el gobernador en turno y al decir que aspira a ser candidato del PRI a la gubernatura en el 2016.
Hoy fue el Subsecretario de la Secretaría de Turismo (Sectur), Carlos Joaquín González, que de manera sorprendente llegó a Chetumal para anunciar una millonaria inversión –doce millones de pesos- para infraestructura turística en la región, acción que obviamente no es creíble tomando en cuenta que es la primera ocasión en sus más de dos años como funcionario federal que viene a la región a hacer este tipo de anuncios.
Es obvio que a Carlos Joaquín ya le ganan las ganas por andar en campaña, por desenterrar el hacha, por lanzar el grito de guerra, pero “alguien” o mejor dicho “algunos” han sugerido o recomendado cautela, que se tranquilice, que respete los tiempos.
Decimos y creemos eso porque es raro que durante su estadía en el sur de Quintana Roo, Carlos Joaquín nada más se haya dejado ver en el aeropuerto internacional de Chetumal, ya que después fue llevado al exclusivo fraccionamiento Andara donde tiene su vivienda el ex gobernador, Félix González Canto, donde permaneció dos horas, se presume que sostuvo una reunión con el antes citado y el gobernador, Betoborge.
Dos horas después, mediante una Suburban fue sacado del citado fraccionamiento y dejado en el bulevar bahía, en las inmediaciones de una café Italiano, de donde lo recogieron personal de su confianza para trasladarse, vía carretera, a Campeche, no sin antes pasar a saludar a huestes o seguidores de Carlos A Madrazo, Sergio Butrón Casas, Nicolás Bravo, Morocoy, hasta llegar a la zona arqueológica de Calakmul, Campeche.
No nos causa asombro que en pleno proceso sucesorio a Carlos Joaquín surja un amor infinito por los cuatro municipios del sur de Quintana Roo, pero lo ideal sería que sus visitas sean frecuentes y que traigan beneficios a la población.
Porque los quintanarroenses sabemos o cuando menos eso entendemos, es que la promoción turística la hace el gobernador Betoborge, la hacen los presidentes municipales, la realizan los turisteros quienes saben y conocen de turismo que integran los fideicomisos.
Lo que sabemos los quintanarroenses es que si les siguen el turismo ha mejorado en el estado si tenemos los mejores números es por el trabajo constante de la gente que vive aquí y no únicamente por el trabajo de la Sectur.
Entonces estimado amigo Carlos Joaquín, nada nos daría mayor alegría que en su próxima visita nos hable de política, porque presumimos que en su verdadero vocación, y nos quiera vender espejitos sobre inversión turística, porque ya han sido muchos quienes lo han hecho. No cree?